Refrán empleado por los que prefieren su comodidad y provecho al qué dirán de las gentes.

Zahiere al que manda a un mismo tiempo cosas contrarias.

Modo de aseverar la abundancia o profusión de aquello de que se trata, mayormente si alguien lo niega o pone en duda.

Exclamación en que se prorrumpe al saber la muerte de un párvulo.

Suele decirse de los niños que, curiosos por naturaleza, cuentan todo lo que ven, deban o no deban contarlo.

Es uno de tantos refranes como emplea la gastronomía para indicar, seguramente según el gusto de su inventor, que la mejor manera de comer ambos pescados es la indicada respectivamente.

Refrán que enseña que así como el mero adorno no proporciona utilidad alguna, de igual manera suele suceder con los honores y distinciones que carecen de emolumentos.

Empléase para alentar a la ejecución de alguna cosa difícil o trabajosa. Algunos suelen añadir: que son de arrope.

Para conseguir la victoria es la primera cualidad el valor, pues sin éste, todas las armas que se empleen serán malas, por buenas que sean.

Desaparecer uno, o una cosa, súbita e inesperadamente.

Frase tomada de un juego de muchachos, con la cual se da a entender que cada uno se meta en sus asuntos, sin pretender entender en los de los demás.

Se dice contra los que atribuyen una cosa presente a causa muy remota.

Porque éste sabe cómo se los ajusta, en tanto que una persona extraña suele ponerlos de mala manera, ya ladeando aquéllos, o ya colocando éste al revés, o de medio lado, etc.

Recomienda para el matrimonio de la mujer, la seriedad de un hombre entrado en años, mejor que la inexperiencia de un mozalbete presumido.

Conminación empleada contra aquella persona que augura o predice algo que no nos agrada o no nos conviene.

Refrán usado en tierra de Salamanca para indicar que antes de emprender algún asunto se tomen todas las precauciones debidas.

Exhorta a que se piense con detenimiento, antes de tomar una resolución extrema en asunto de tal trascendencia, como que es para toda la vida, para no tener que arrepentirse después cuando ya no tiene remedio.

Recomienda que se mire bien uno antes de meterse en un asunto grave, para no tener que arrepentirse después de ello.