301. | Los caramillos que levanta y mete | Quien se alborota, y más mujeres. |
302. | Los celos a las veces despiertan a quien duerme | |
303. | Los cochinos y la puerca todos andan a la vuelta | |
304. | Los colchones de fulano deben de ser blandos | Dícese por el sosiego de algunos que tienen trampas y deudas, que no parece debían dormir ni sosegar. |
305. | Los corazones no son de piedra | |
306. | Los cuidados del obispo matan al asno que está en el establo | |
307. | Los cuñados es sangre atravesada y desvenada | |
308. | Los días no se van en balde | |
309. | Los de Doñinos, pocos y mal avenidos | Lugarillo cerca de Salamanca. |
310. | Los de Lorca, madre, querránse vengarse | Que es apetecida la venganza |
311. | Los de Peñaranda, lo que dicen a la noche no lo cumplen a la mañana | |
312. | Los de Sisón comen a este son | En la fortaleza de Segovia tañen un cuerno los de Zamarramala, en centinela, y son francos por este cuidado. Hacen en aquel lugar muy buenas natas y llévanlas a vender a Segovia, y muchas veces con más apariencia que substancia, y por este engaño los llaman los de Sisón, por el menoscabo y sisa de las natas; también los llaman hidalgos, por el cuerno. |
313. | Los dedos de las manos no son todos iguales | Sinónimo(s): Los dedos de las mano no son todos iguales. |
314. | Los dedos se le hacían hombres | Atajándose en el cuidado de cumplir con ellos. Sinónimo(s): Los dedos se le hacían huéspedes. |
315. | Los delitos llevan a las espaldas el castigo | |
316. | Los demasiados celos, a las veces despiertan a quien está durmiendo | |
317. | Los descomulgados, pan comen | |
318. | Los desposados de Orihuela, que ella lloraba por no ir con él y él por no ir con ella | |
319. | Los dichos en nos, los hechos en Dios | |
320. | Los diezmos de Dios, de tres blancas sisar las dos | |